Con motivo de la celebración del 30º aniversario de Vinícola de Tomelloso, los miembros del Consejo Rector deciden hacer un vino especial conmemorativo con la cosecha 2016. Se escogieron dos varietales poco comunes en La Mancha, pero a la vez de gran reconocimiento internacional: Viognier y Petit Verdot, realizándose una vendimia y selección manual. Tras unos meses de esmerada elaboración y envejecimiento, en diciembre 2017 se lanza comercialmente “Pico y Brazo”.
Este proyecto a su vez quería reconocer el trabajo de los agricultores de antaño, homenajeando a dos personajes ilustres de Tomelloso. La Terrera y El Picador, no tienen nombre propio, son mujeres y hombres, en su mayoría los propios viticultores y sus familias, quienes destinaban el tiempo que no estaban trabajando la viña a la construcción de las cuevas que hoy inundan el subsuelo de esta ciudad. Estas cuevas excavadas bajo la roca (la tosca) son únicas y diferentes de cualquier otra cueva de elaboración del mundo. Durante décadas fueron el lugar idóneo para elaborar y conservar el vino en condiciones de temperatura y humedad estables, evitando las altas temperaturas exteriores del verano manchego, hasta que llegaron las modernas bodegas actuales y poco a poco se fueron abandonando.
Estos vinos de autor reciben la marca “Pico y Brazo”, que es como se construyeron literalmente las cuevas “a pico y brazo”. Se trata de una edición limitada de unas 6000 botellas de blanco Viognier (La Terrera) y otras 6000 botellas de tinto Petit Verdot (El Picador). Para el diseño de la etiqueta se ha contado con la colaboración del artista local Roberto Carretero “Gobi”, que ha devuelto a la vida a estos dos personajes mediante la técnica del graffiti.